El sindicalismo radical de los privilegiados

Todos sabéis mi beligerancia por la causa sindical. Considero los sindicatos esenciales para cualquier democracia avanzada como mecanismo que compense la desigualdad a la hora de negociar que tenemos los trabajadores (además de unas organizaciones esenciales en la democracia y la última línea de defensa del estado del bienestar). De ello he escrito varios artículos y economistas como Krugman comparten a rasgos generales mi visión. Pero los sindicatos, como los partidos políticos, asociaciones, etc… también pueden tener su cara negativa. Entre otras, a nivel del mercado laboral un sindicalismo de los privilegiados termina perjudicando a todos. Me explico, imaginémonos un sistema laboral que tuviera trabajadores (del sector privado mayoritariamente) que se encuentran en situación de monopsonio, y otros, cuyo sector está hipersindicalizado y por sus características compensan el monopsonio o tienen una capacidad de presionar a sus empleadores que supera la capacidad de los empresarios de negociación (por ejemplo, porqué Continua llegint