Los catalanes ya hemos demostrado ser soberanos, ahora la duda es si queremos ser independientes
Cuando 2,3 millones de personas practican la desobediencia civil como los 2,3 millones de catalanes han hecho este domingo, es un resultado que no se puede cuestionar. La soberanía no se debate o se discute, se ejerce. Cuando 2,3 millones de personas deciden que pasan totalmente de las autoridades del estado español y ejercer su derecho a participar a pesar de las amenazas (en algunos casos directas) de los poderes del estado español es que somos soberanos. Hay pobres de espíritu que hablan de que al no haber consecuencias legales (al menos hasta ahora) y no haber secuestrado las urnas no ha habido desobediencia civil. La desobediencia civil es un riesgo, no una certeza, riesgo porqué asumes que te pueden aplicar todo el peso de la ley y confías en que la masa que ejerza esa desobediencia civil sea tan grande que las consecuencias legales sean mínimas. Asumir el riesgo Continua llegint