Es la democracia idiota, es la democracia

La imputación de Rigau, Ortega y Mas por poner unas urnas de cartón el 9N ha desplazado el frame del procés nuevamente al concepto “democracia”. Los indepes somos aproximadamente la mitad de la población catalana, pero los que queremos un proceso democrático y un referéndum para decidir el futuro de Catalunya somos del orden del 70% de la población. Y no es solo una cuestión de % del cuerpo social, sino que la sociedad civil organizada de forma hegemónicamente mayoritaria está en ese frame. La imputación ha vuelto a poner en marcha el Pacte Nacional del Dret a Decidir, no para organizar ninguna consulta, sino para proteger a los que la organizaron y generar un foco de protesta contra unos poderes estatales incapaces de aceptar que haya una región que quieran o no, vamos a decidir nuestro futuro por vías democráticas petándonos si es necesario, parte de la legislación española. Continua llegint

Unionismo e independentismo social, la estrategia del bunker vs. la estrategia inclusiva

La elección de Jordi Sánchez como nuevo presidente de l’Assemblea Nacional de Catalunya ha sido un guiño hacia la estrategia de “vagón de cola” del independentismo. Esa en la que estamos un puñado de arreplegaos intentando construir una estrategia que intente ensanchar la base social del independentismo aún cuando esto retire energías de llevar la movilización de los que ya son independentistas. La ANC ha ido modulando ya en tiempos de Carme Forcadell la estrategia de movilización del core independentista, en especial desde el 9N, y Jordi Sánchez es un paso más, muy profundo, en ahondar en la estrategia de vía lenta y de buscar mayorías sociales más sólidas. Es un gran golpe de efecto, Jordi Sánchez ha estado siempre en la órbita de ICV y del PSC y representa ese tipo de figuras que han luchado por el federalismo y que lo han intentado todo para hacerlo viable y que Continua llegint

Los independentistas somos suficientes para ganar plebiscitarias pero no para ganar referéndums

Dos semanas casi después del 9N se pueden hacer reflexiones en frío. 2.350.000 votos realizados en condiciones difíciles fue un buen resultado y una victoria de los desobedientes civiles, pero evidencia dos cosas. Hay una mayoría social a favor de la independencia, pero esta es muy justa para garantizar una victoria en un referéndum de independencia. Hay análisis casi ridículos que dicen que “sólo” somos 1/4 de la población, al comparar el 1.900.000 votos independentistas con el censo total de la población adulta. Algo bastante ridículo. Es considerar que el colectivo independentista es inasequible a las amenazas, que toda persona soberanista siente la misma motivación para votar algo sin consecuencias legales, que por ejemplo, elegir un gobierno, que el tener menos colegios y mesas electorales o no tener información en el hogar de donde se vota, la ausencia de voto por correo o que la falta de una campaña que Continua llegint

9 hechos sobre el #9N2014

Hecho número 1: La victoria de los desobedientes civiles es irreversible. Catalunya es un sujeto soberano siempre que los catalanes queramos. Hecho número 2: El independentismo con este resultado conseguiría la mayoría absoluta en cualquier escenario de votación. Hecho número 3: En una votación con censos, más colegios y mesas, permisos laborales para asistir a votar, con garantías democrácticas, con campaña real en todas las televisiones, con efectos vinculantes de cualquier tipo (por ejemplo, votar un parlamento) el unionismo hubiera tenido más votos pero también el independentismo. Hecho número 4: El resultado del “Sí-No”, es excelente teniendo en cuenta que es huérfano de voces y referentes políticos, seguramente es una preferencia relevante que existe pero de la que nadie da voz política. Hecho número 5: El independentismo ha estado a punto de perder el pulso a la desobediencia si no llega a arrastrar al “Sí-No” y una parte del “No”, Continua llegint