Fanboys en la red: hooliganismo partisano

Hay un debate sobre los partidos políticos y sus reformas, están en crisis, pero aún así son necesarios. Sobre propuestas para reformarlos las hay de todos colores… y el debate es más profundo de lo que parece, ya que una parte de las propuestas que leo lo que hacen es empoderar aún más los guardianes de las estructuras intermedias de los partidos (como generar nuevos órganos de control a la dirección, que serían escogidos entre esos cuadros intermedios que apenas se renuevan o están (estamos) en las puertas giratorias de los numerosos cargos orgánicos), que son los que bloquean la renovación de los propios partidos. Pero más allá de este debate, lo que está claro es que el hooliganismo partisano es un verdadero cáncer de la política. Os pongo un ejemplo de un diputado del PP.. ..  pero aunque nos parezca ridículo, este hooliganismo está en mayor o menor medida Continua llegint

La crítica política ha de disparar hacia arriba

El conflicto dialéctico y la crítica asociada a la actividad política hace que quien quiera actuar en el ámbito político no pase por la vida como una virgen vestal con una inmaculada túnica blanca. Sin querer cometemos falacias dialécticas, fallos argumentales, corremos el riesgo de tener un exceso de celo en la defensa de nuestras ideas o en las críticas hacia nuestros compañeros por el mero hecho de que estamos implicados emocionalmente con una causa. Pero hay un principio ético que creo que no es bueno rebasar y es que nos reservemos las críticas más mordaces para hacerlas hacia arriba. Es bueno que las organizaciones tengan sistemas de sanción, y que las acciones asociales que van a causar daño intencionado sin ningún ánimo constructivo sean sancionables, en el difícil equilibrio con la libertad individual. Tampoco es malo que “entre pares” se realicen críticas a la acción política de cada uno. Continua llegint