Volamos mucho, muchísimo y hay muy pocos accidentes aéreos

Cada vez que hay un accidente aéreo se abre un debate alarmista sobre la seguridad aérea. Es curioso que este debate se abra con accidentes navales, ferroviarios y aéreos, pero encambio no ocurre cuando hay un accidente de tráfico, ni siquiera cuando es un autocar el que se siniestra. La sensación de falta de control que tenemos los viajeros de aviones, trenes y barcos nos hace creer que estamos más desamparados y en más riesgo que un viajero en vehículo por carretera. No podemos hacer nada más que confiar en los pilotos, personal de tierra y que todo funcione. En cambio en la carretera las decisiones individuales influyen más a la hora de tener accidentes (beber alcohol, no descansar, mantener un vehículo en malas condiciones o decidir viajar con un tarado) pero no deja de tener imponderables que no están bajo nuestro control. Además al estar en más manos (y menos profesionales, Continua llegint